¿Aaaahhh vas a viajar en coche con gemelos, o con un bebé de unos cuantos meses por primera vez? Agárrate porque estás a punto de emprender una aventura, no, en serio, Frodo y su compadre en el Señor de los Anillos se quedan cortos.
Aquí en Estados Unidos se acostumbra a manejar grandes distancias y a irte de paseo a ciudades cercanas a donde vives. Nosotros tenemos familia en Houston y pues hacemos el recorrido varias veces al año, pero esta vez fue la primera que lo hicimos los cuatro (y sin contar perro).
¿Qué tal estuvo? ¡Muy padre! (en tono sarcástico). ¿Cómo nos fue? ¡Muy padre! (en tono sarcástico).
Aquí están las 11 diferencias que tuvimos ya con los gemelos:
1. Vas un poquito más cargado.
2. Haces paradas en hoteles de paso (a media hora de haber salido).
3. Siempre hay snacks en el camino.
4. Las paradas técnicas requieren un poco más de técnica.
5. Las siestas de los bebés mandan el camino, deciden cuándo y dónde te paras.
6. Spotify ya no es el mejor entretenimiento.
7. Si te cansas de manejar tienes un chofer de confianza.
8. El hambre de los bebés también decide cuándo y dónde te paras (por 2a y 3a vez).
9. Si hay un “accidente” pañalero hay soluciones de camionero.
10. El baño no necesariamente es en un baño.
11. Un viaje de 3 horas y media se hace del doble de tiempo.
Y esto es sólo de ida… ¿Cuándo vamos a regresar a Houston? ¡Muy pronto! (en tono sarcástico).